Con el progreso tecnológico, así como el fuerte apoyo del gobierno y los inversores, el desarrollo de la energía de hidrógeno limpio en la región APAC goza de amplias perspectivas. Sin embargo, el desarrollo del hidrógeno limpio todavía se enfrenta a grandes desafíos antes de madurar, incluidos los altos costos, las barreras técnicas y la falta de un mercado y suficientes políticas ambiciosas. Además, a corto plazo, el mayor crecimiento del hidrógeno bajo en carbono como energía limpia tiene que superar la incertidumbre económica provocada por la pandemia de COVID-19.
Este documento resume y analiza el estado, el potencial y las políticas en las aplicaciones del hidrógeno limpio en el sector industrial en la región APAC. Con base en el análisis, se presentan las siguientes perspectivas para ayudar a descarbonizar aún más la industria con hidrógeno limpio.
En primer lugar, es importante proporcionar un mayor apoyo político al sector industrial en los países de APAC. En las primeras etapas, la política gubernamental, el apoyo financiero para el hidrógeno limpio y la infraestructura son esenciales para mejorar la competitividad comercial del hidrógeno en relación con los combustibles fósiles. Las actuales estrategias nacionales de hidrógeno en algunos países de APAC se proponen de manera aproximada y general para el desarrollo de todos los sectores relacionados. Si se establecen objetivos específicos, la mayoría de ellos son para el sector de la movilidad, como en la República de Corea y Japón. Sin embargo, hay una falta de objetivos claros y vías de desarrollo para el despliegue de hidrógeno limpio en el sector industrial. Se ha sugerido el desarrollo de políticas de estímulo específicas para el hidrógeno limpio para diferentes industrias para acelerar el despliegue de la descarbonización.
En segundo lugar, es esencial adaptar las medidas de promoción a las condiciones locales de cada país. El desarrollo económico y la estructura energética de los países de la región APAC varían mucho, y es importante comprender las industrias o sectores de cada país que impulsan la demanda y los costos de hidrógeno existentes desde la perspectiva de la demanda. Se pueden implementar diferentes estrategias para los países desarrollados y de ingresos medios. Los países que pueden aportar apalancamiento podrían compartir esquemas claros como fondos fiduciarios, donaciones, préstamos en condiciones concesionarias, impuestos y exenciones. Y los países que no pueden aportar apalancamiento financiero deben implementar regulaciones amigables para dar la bienvenida a proyectos innovadores que puedan traer curvas de aprendizaje sostenibles en el corto plazo. Se pueden identificar las fortalezas y debilidades de cada país para elaborar una especie de estrategia regional (Geze 2022).
En tercer lugar, el hidrógeno bajo en carbono está involucrado en diversos procesos industriales desde el punto de vista técnico, mientras que al mismo tiempo también interactúa con otros sectores como el sector de generación de energía en el proceso de conversión. La industria química, la siderurgia y las industrias de refinado de petróleo emiten una gran cantidad de CO2. Los sistemas de promoción del hidrógeno también deben coordinarse con otros sistemas de incentivos medioambientales, como la fijación de precios y el comercio del carbono, para garantizar que las políticas deseadas se lleven a cabo de manera eficiente. Este punto rara vez se menciona en las estrategias nacionales actuales. Se sugiere que la aplicación de hidrógeno limpio debería considerarse en el sector industrial en el esquema nacional de incentivos ambientales.
Por último, la región APAC disfruta de un gran potencial para la producción de hidrógeno limpio y la capacidad de lograr el consumo local de hidrógeno. En términos de suministro de hidrógeno, existe el potencial de exportar hidrógeno limpio de regiones ricas en recursos renovables a centros de alta demanda en APAC. Como se mencionó anteriormente, Australia tiene el potencial de ser uno de los principales exportadores de hidrógeno limpio debido a su infraestructura relativamente madura y abundantes recursos de energía renovable. Además, Nueva Zelandia ha expresado interés en maximizar su capacidad de exportar hidrógeno. Desde el lado de la demanda, Japón es considerado potencialmente uno de los mayores importadores de hidrógeno verde en Asia debido a su falta de recursos renovables. En general, aunque todavía no está claro si la producción y exportación de hidrógeno limpio se puede realizar a escala comercial, ya hay algunos posibles candidatos en la región APAC que podrían entregar hidrógeno verde o azul a los consumidores de toda la región.