La era de la computación cuántica está a punto de comenzar, con profundas implicaciones para la economía global y el sistema financiero. El rápido desarrollo de la computación cuántica trae beneficios y riesgos. Las computadoras cuánticas pueden revolucionar industrias y campos que requieren una potencia informática significativa, incluido el modelado de mercados financieros, el diseño de nuevos medicamentos y vacunas efectivos y el empoderamiento de la inteligencia artificial, así como la creación de una forma nueva y segura de comunicación (Internet cuántico). Pero también descifrarían muchos de los algoritmos de cifrado actuales y amenazarían la estabilidad financiera al comprometer la seguridad de la banca móvil, el comercio electrónico, la tecnología financiera, las monedas digitales y el intercambio de información en Internet. Si bien el trabajo sobre el cifrado cuántico seguro aún está en progreso, las instituciones financieras deben tomar medidas ahora para prepararse para la transición criptográfica, evaluando los riesgos futuros y retroactivos de las computadoras cuánticas, haciendo un inventario de sus algoritmos criptográficos (especialmente las claves públicas) y construyendo agilidad criptográfica para mejorar la resiliencia general de la ciberseguridad.