El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) han publicado un informe que marca el cierre de la segunda fase de la Iniciativa de Brechas de Datos del G20 (DGI-2) y establece un plan de trabajo para la nueva iniciativa propuesta. «Los datos precisos y oportunos son esenciales para evaluar los riesgos para la estabilidad económica y financiera y para desarrollar respuestas políticas efectivas para abordar esos riesgos. Tales datos son cada vez más importantes a medida que las economías enfrentan mayores incertidumbres en un entorno que cambia rápidamente», afirman.